Conciertos

LIVE REVIEW | BAD RELIGION en Chile: Más que una banda, es toda una institución

iRock

12 Febrero, 2014

BAD RELIGION EN CHILE

PARkWAY DRIVE + HEAVEN SHALL BURN

11 DE FEBRERO 2014 | TEATRO CAUPOLICÁN

Por Freddy Veliz

Febrero ya no es un mes muerto en Santiago, como hace algunos años atrás, la atribulada agenda de conciertos actualmente se extiende por todos los meses del año. Ayer vivimos un exclusivo momento a nivel sudamericano, puesto que confluyeron tres importantes bandas en un solo encuentro, cosa que sucedió solo en nuestro país. Así los alemanes HEAVEN SHALL BURN junto a los australianos de PARKWAY DRIVE quienes venían de tocar juntos en Buenos Aires, unieron su show a los legendarios BAD RELIGION, los californianos que por quinta vez regresaban a nuestro país.

Cuando el reloj marcó las 19:00 horas exactas los alemanes de HEAVEN SHALL BURN fueron los encargados abrir el telón a una noche memorable, con la cancha del recinto santiaguino casi al tope. La fuerza que caracteriza a esta agrupación ligada al metalcore se hizo sentir con un repertorio compacto en que incluyen solo un corte de Veto, su última placa de estudio. Repasaron parte de su carrera con temas como “Counterweight”, “Land of Upright Ones”, “Combat”, “Voice of the Voiceless” o “Eitzeit”, con los que provocaron un interminable mosh, que no paró en toda la presentación de los germanos que por tercera vez pisaban suelo chileno. Un show potente, donde los pesados riff no dan tregua, Marcus Bischoff no se ahorra esfuerzos para que su gutural interpretación vocal no baje la intensidad en los aproximadamente 45 minutos de duración de esta nueva pasada, que dejó a los presentes casi sin aliento para lo que se venía, por lo que el intermedio fue de gran utilidad para reponer energías.

Luego de unos 15 minutos llegaba el turno de subir al escenario de los australianos PARKWAY DRIVE, la cancha ya no aguantaba a nadie más y la platea alta comenzaba a repletarse, muchos comenzaron a saltar hacia cancha, lo que por un momento parecía que colapsaría, no había ya espacio ni para mover los pies. Con un telón negro con el logo de la banda en el centro, la agresiva propuesta de esta agrupación formada el 2002 en Byron Bay un balneario al norte de Sydney, Australia, provocó un nuevo y envolvente mosh en el centro de la cancha del Caupolicán. “Karma”, “Idols and Anchors”, “Boneyards”, “Home is for the Heartless”. “Swing” y “Carrion” fueron algunas de las piezas que nos tenían preparadas para esta arrolladora presentación. El carismático Winston McCall logra entablar una buena relación con el público, a quienes constantemente los insta a correr en círculos transformando el teatro en un hervidero, gran presentación con un sonido potente y sin fallas perceptibles, donde rescato además la calculada precisión del baterista Ben Gordon. Un intenso aperitivo para recibir a la leyenda californiana.

A un par de minutos para que se cumplieran las 22:00 horas, se apagan las luces y la banda encabezada por Greg Graffin sube al escenario y desde el primer segundo nos apuntalan con una performance llena de energía, veloces riff y fuerza interpretativa.BAD RELIGION más que una banda es toda una institución, el principal referente del punk rock que a fines de los 80s tomó un giro hacia melodías más accesibles y de fácil escucha, pero sin perder un ápice de fuerza y contenidos ligados a la crítica social, política o religiosa. Con el teatro casi copado en su totalidad los californianos repasaron parte de “True North” su última y elogiada placa partiendo con “Fuck You”, tema que viene abriendo cada concierto de esta intensa gira.

Los slam, body surf (que provocaron varias caídas hacia la fosa que divide el escenario del público), circle pit , etc, eran la postal que se mantuvo durante los 31 temas del set list de esta noche que difícilmente se borre de la memoria de los presentes. Una real retrospectiva por la carrera de esta agrupación que se encumbra por los 35 años de trayectoria.

Así se fueron sucediendo tracks como “Modern Man”, “New America”, “Raise Your Voice”, “Los Angeles Burning”, “Big Bang”, “I Want Conquer the World”, la aplaudida “21^st Century (Digital Boy), “Sinister Rouge”, “Stranger than Fiction”, etc.

Uno de los momentos peack fue el pequeño repaso de, en mi opinión, su álbum más emblemático, el que sentó las bases del estilo posterior de Bad Religion, me refiero a Suffer, álbum publicado en 1988, del que nos sorprenden con la grandiosa “You Are (The Goverment)”, para seguir con la homónima “Suffer”, “How Much is Enough?” y “ Do What You Want”, el ambiente sofocante y pasaba a segundo plano ante la artillería de éxitos de esta verdadera aplanadora musical.

Una noche que se vivió como un carnaval de rock and roll, uno que terminó con emblemas como “Fuck Armagedon…This is Hell”de How Could Hell Be Any Worse?, primera placa de la banda del Crossbuster, publicado en 1981, continuando con la coreada“Punk Rock Song” para finalizar con la tremenda “American Jesus” con varios que burlaron la seguridad y subieron al escenario para abrazar y besar a Greg Graffin, siendo controlados rápidamente, por un momento pensé que el escenario sería realmente invadido de fanáticos, la euforia era bastante aguda.

Un regreso fenomenal de Bad Religion por estos lados, un show que sin dudas se enmarca dentro de los mejores del género, no se puede esperar menos de una banda de vasta experiencia, seria y con ideas claras dentro de lo que ellos quieren entregar a su público, eso es de nuestra admiración. A pesar de que el sonido no fue de los mejores, todo pasó a segundo plano, ante la bombástica artillería californiana. Una mala religión que se ganó los aplausos hasta del mas ateo de los comensales.