Foto: Miguel Fuentes – The Fanlab
2 de octubre 2016 | Movistar Arena
Nota: Mariela Sandoval A. | Fotos: Miguel Fuentes (The FanLab)
Este 2 de octubre fue un día especial para el fanático del rock en Chile, y más aún para los seguidores de la banda norteamericana Aerosmith, que esta vez ha regresado a Chile para llevar a cabo su último concierto. Una carrera marcada con grandes éxitos y/o clásicos de la bohemia nacional, que la han llevado a ser una de las bandas rockeras más exitosas del mundo y considerada un estandarte del rock norteamericano, pues bien lo han conseguido, con glamour y temas bien logrados.
Como antesala a lo que se venía en el Movistar Arena se presentó la banda nacional We Are The Grand, que con sus canciones en inglés logró cautivar al público asistente, validando la proyección internacional que han logrado en este último tiempo. Sin duda un acierto en lo que respecta a teloneros y con un sonido perfecto.
A las 20:10, con un recinto repleto, sale al escenario Steven Tyler, Joe Perry, Brad Whitford, Tom Hamilton y Joe Kramer, bajo la melodía del clásico Hoochie Coochie Man de Muddy Waters, para comenzar el show con ‘Back in The Saddle’ y con algunos problemas de sonido, que causó uno que otro malestar a los asistentes del Movistar Arena, problema que duro a lo menos hasta ‘Crazy’, el quinto tema del set list programado. En estos primeros 40 minutos Aerosmith tiró como se dice en Chile “Toda la carne a la parrilla”, con los clásicos ‘Love in an Elevator’, ‘Cryin’, ‘Jaded’ y la ya mencionada ‘Crazy’.
Steven Tyler se mostró siempre muy enérgico y extrovertido, jugando con sus compañeros de banda y con las cámaras del escenario. En cuanto a su voz, estuvo a la altura de lo que viene realizando Aerosmith en casi 50 años de trayectoria, un poco quebrada al principio del show, pero que ya a la segunda canción mejoró considerablemente.
El inmenso montaje en el escenario cumplió un objetivo importante en el show de Aerosmith; con grandes juegos de luces y una gran pantalla gigante al centro del escenario, acompañada de dos pantallas más a cada costado, un pequeño pasillo en cancha VIP, para lograr más cercanía con los asistentes, que dicho sea de paso, no paraban de fotografiar y grabar cada segundo del concierto, quizás hasta perdiendo detalles importante de los que estaba ocurriendo justo en sus narices, sin embargo, esto se debe a la evolución tecnológica de nuestro siglo y evidentemente este es un punto aparte, que sale de lo musical.
El set list de Aerosmith contó con tres cover, entre ellos ‘Stop Messin’ Around’ (Fleetwood Mac), ‘Come Together’ (The Beatles), quizás uno de los temas más coreados de la noche y la clásica ‘Train Kept A Rollin’ de Tiny Bradshaw, canción con la que dieron término al concierto. Finalmente, continuaron con el encore compuesto por ‘Dream On’ y ‘Sweet Emotion’.
En definitiva se vivió un show cargado de grandes éxitos, un Steven Tyler dando todo en el escenario y bromeando una que otra vez, y un Joe Perry que se mostró recuperado de los problemas de salud que tuvo hace algunas semanas. Aerosmith se despide así de sus seguidores en Chile, con toda la esencia del rock, con un show de casi dos horas de duración y continuando su carrera hasta que el cuerpo de “Los Chicos Malos de Boston” se los permita, esperando claramente que no sea en plena decadencia. Lamentablemente, el sonido no fue del todo acogedor, con mal retorno entre tanto en tanto, guitarras con algunos problemas de afinación y Tyler a ratos incómodo tratando de dar lo mejor de sí. Sin embargo, la ovación hacia la banda era tal que estos problemas de sonido terminaron siendo secundarios al evento en sí.
La próxima parada de la banda será en el Estadio de Córdoba, Argentina, donde darán su primer concierto de dos en el país vecino.
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