Iron Maiden: el reencuentro de la Sagrada Familia

Nota: Freddy Véliz Fotos: DG Medios y Andie Borie

Una vez más, miles de fanáticos de Iron Maiden se congregaron cual ceremonia eucarística para presenciar su magno espectáculo. La banda sigue marcando hitos en nuestro país, agotando un primer show en el Estadio Nacional y a solo mil entradas de concretar un segundo sold out para el concierto que se sumó en el mismo estadio para este 28 de noviembre. Record absoluto de una banda de metal en Chile.

En iRock estuvimos presentes ayer 27, en un reencuentro épico con la banda comandada por el incombustible Steve Harris, quien junto a Dave Murray, Adrian Smith, Janick Gers, Nicko McBrain y Bruce Dickinson, ofrecieron ante 62.000 almas, un episodio más de su travesía titulada The Future Past Tour.

Un concierto de Iron Maiden en Chile, se ha convertido en toda una tradición peregrina, donde familias completas llegan a disfrutar de la música de los británicos, algo impensado hace cuarenta años atrás, cuando eran mirados con recelo por los adultos de la época. Los tiempos han cambiado y todos disfrutan del  ambiente festivo que se respira desde tempranas horas del día en los alrededores del recinto deportivo. Hordas de fanáticos venidos desde distintos puntos del país, y también del extranjero, llegan al estadio para explotar en ovación cuando pasando unos minutos de las 21:00 horas, y suena el clásico Doctor Doctor de U.F.O., señal inequívoca de que La Doncella subirá al escenario. Nunca una intro envasada causa tanto fervor como lo hace este himno que es usado como cábala por los ingleses en cada uno de sus espectáculos. En este tour antecede al tema final de Blade Runner, compuesto por el fallecido Vangelis, tal y como lo escuchamos en su recordada gira del Somewhere in Time en 1986. Y calcada a ese histórico tour, nos golpean con “Caught Somewhere in Time” seguida por la estupendamente ejecutada “Stranger in a Strange Land” en medio de la cual aparece un ovacionado Eddie forajido. Desde la partida impresiona el excelente estado físico y vocal de Bruce Dickinson, defendiendo su cetro como uno de los más grandes vocalistas de todos los tiempos.

Una escenografía bastante simple pero efectiva, donde el telón central va cambiando, adecuándose a la canción según su temática o disco en cuestión, con impactantes ilustraciones e imágenes digitales donde Eddie va apareciendo imponente, en medio de la teatralidad de la puesta en escena, como un sello distintivo e histórico en la banda, nos envuelve en una dinámica sostenida de un repertorio que abraza principalmente su último álbum “Senjutsu” y “Somewhere in Time”. El primer repaso de su última placa lo dan con el pujante “The Writing on the Wall”. Corte que funciona perfecto en vivo y que Bruce interpreta magistralmente.

Con “Days of Future Past” y “The Time Machine” se continua repasando ‘Senjutsu’, un álbum que tuvo críticas divididas el año de su lanzamiento, pero que se ha ido posicionando positivamente con el tiempo, y claramente se vio reflejado en la recepción del público, en un set que sinceramente no debe haber sido el esperado por el fan más apegado a las viejas glorias, porque si bien pudimos apreciar cortes como “The Prisoner”(un clásico muy infravalorado, pero que en mi opinión es de esas grandes joyas del álbum The Number of the Beast), corear un “hit” como “Can I Play with Madness” o la insigne “Heaven Can Wait”, ser testigos presenciales de la interpretación en vivo de la epopéyica “Alexander the Great”, que fue esquiva en todo el historial de giras de Iron Maiden, y que en este tour le dieron la atención merecida. Son momentos significativos, y muchos probablemente se sintieron decepcionados por el hecho de que himnos absolutos como “The Number of the Beast”, “2 minutes to midnight” o “Run to the Hills” no sean parte del repertorio esta vez, pero debemos comprender que la banda se encuentra totalmente en actividad creativa y su catálogo actual es bastante extenso, la prioridad de este tour está enfocada en mostrar lo mejor de su más reciente trabajo, y unirlo a la temática futurista del enorme “Somewhere in time”, rescatando la imaginería de esa histórica gira, muy bien conceptualizado con la aparición del Eddie Samurai y el Eddie futurista, en medio de imágenes tridimensionales y estética cyberpunk. 

“Death of the Celts”  se escuchó simplemente soberbia, con Murray y Smith regalándonos momentos de intensos solos, que nos remiten a sus raíces folclóricas británicas en una performance maravillosa, claro ejemplo de como sus nuevas creaciones toman mayor fuerza y significancia en vivo. “Fear of the dark” no demanda mayores análisis, siempre nos entrega momentos de alto nivel junto al público iluminando el estadio con sus celulares y haciendo explotar el ambiente con su contagioso coro, la infaltable “Iron Maiden” con sus crudos y pesados riffs marca la primera despedida de la banda, que vuelve con otro de sus temas actuales, la extensa “Hell on Earth” y prosiguen con la épica y sangrienta Batalla de Balaclava en la eterna “The Trooper”, finalizando los fuegos con “Wasted Years”, coreada a unísono y desgarrando gargantas desde un público que fue constantemente avivado por Bruce Dickinson como un gran maestro de ceremonia, que con 66 años en el cuerpo parece estar en mejor forma que nunca.

Un concierto que el público espera con ansias cada vez que la banda anuncia un nuevo tour, y que a pesar de que el sonido no siempre es el mejor aliado del conjunto a cielo abierto, la espectacularidad y significancia de la agrupación más grande del heavy metal mundial pesa tanto, que vivimos la experiencia con intensa emoción, y congregados como una gran familia, una Sagrada Familia.

The Future Past Tour tuvo 37 fechas el 2023 en su tramo europeo. Fue retomada a inicios de septiembre de este 2024 en Australia cumpliéndose 40 conciertos este 28 de Noviembre en Santiago de Chile, continuando con dos conciertos en Argentina y terminando con dos más en Brasil. Toda una travesía digna de admiración.

Iron Maiden es imparable, y ya anunciaron su próxima gira, que parte en mayo del 2025 en Europa, titulada “Run For your Lives” y celebra el aniversario número 50 de la agrupación, repasando sus nueve primeros álbumes, sin duda alguna, los años de mayor gloria de los ingleses. Se espera estén de vuelta por este lado del hemisferio el 2026, asi es que esto no ha terminado aquí, y los que esperan un concierto lleno de clásicos, se viene la retribución y seguramente será una nueva experiencia magistral junto a la Doncella de Hierro, los esperamos como en su propia casa.

PD: La apertura estuvo a cargo de la destacada banda nacional Dogma, como prensa no tuvimos acceso a su presentación, motivo por el cual no fue incluida en la reseña.