Por: @jeff.qlo
En la escena del metal de finales de los 90 y principios de los 2000, una banda emergió con una fuerza arrolladora que rápidamente capturó la atención de millones de seguidores en todo el mundo. Se trata de Disturbed, originaria de Chicago y liderada por la inconfundible voz de David Draiman, la banda se convirtió en uno de los nombres más importantes del Nu metal, un subgénero que estaba en auge en ese momento. Pero lo que distinguió a Disturbed no fue solo su música poderosa, sino su capacidad para evolucionar y llevar el nu metal a nuevas alturas.
Disturbed se formó en 1994, pero no fue hasta el 2000 cuando lanzaron su álbum debut, The Sickness, que les permitió irrumpir en la escena musical internacional. Este disco no solo los colocó en el mapa, sino que estableció un sonido que combinaba la agresividad del metal tradicional con elementos electrónicos, letras introspectivas y un estilo vocal único de Draiman, marcado por sus icónicos guturales y su famoso ooh-wah-ah-ah-ah. El álbum fue un éxito rotundo y ayudó a definir el sonido del Nu metal, un género que ya estaba tomando fuerza con bandas como Korn, Slipknot y Limp Bizkit. Sin embargo, Disturbed logró desmarcarse por su habilidad para fusionar lo visceral del metal con la accesibilidad de melodías pegajosas, lo que les permitió atraer a una audiencia más amplia.
El impacto de Disturbed en el Nu metal no puede ser subestimado, pese a las diferencias políticas que se puedan tener con el vocalista. En un momento en el que el género luchaba por encontrar un equilibrio entre lo alternativo y lo comercial, Disturbed logró desarrollar un estilo que resonó tanto con los trve del metal como con los fanáticos más casuales. Si bien otras bandas de nu metal tendían a inclinarse hacia sonidos más experimentales o alternativos, Disturbed mantuvo un enfoque más centrado en el heavy metal, lo que los hizo más accesibles para una audiencia más variada.
El éxito de canciones como Stupify, Voices y Down with the Sickness, consolidó a la banda como una de las más influyentes del movimiento. Pero su impacto no se limitó a las listas de éxitos; Disturbed también jugó un papel clave en la creación de una identidad para el Nu metal que iba más allá de la música. Con sus potentes letras, muchas veces centradas en la angustia emocional, la lucha interna y los problemas sociales, la banda conectó profundamente con una generación que buscaba formas de expresar su frustración y ansiedad.
A medida que avanzaba la década del 2000, el auge del Nu metal comenzó a decaer. Muchas bandas que habían surgido bajo este paraguas comenzaron a desaparecer o a cambiar drásticamente su estilo. Sin embargo, Disturbed fue una de las pocas agrupaciones que no solo sobrevivió a la caída del subgénero, sino que prosperó más allá de ella.
Además de ser conocidos por su música poderosa y su impacto en el Nu metal, Disturbed ha llamado la atención por la postura política de su líder, David Draiman. A lo largo de los años, Draiman ha sido franco sobre una variedad de temas, desde la libertad de expresión hasta el apoyo a las fuerzas militares, e incluso ha compartido opiniones sobre el conflicto en Medio Oriente, dada su herencia judía. Esto ha provocado una fuerte división entre los oyentes del Metal, algunos deciden separar al artista de la música, mientras que otros creen que no es posible hacerlo. En redes sociales, circula un incentivo a asistir a sus conciertos portando poleras en apoyo de Palestina.
Disturbed visitó Chile por última vez en 2019, en el marco de su gira “Evolution World Tour”, donde ofrecieron un show potente en el Movistar Arena, dejando una impresión memorable entre los fanáticos locales. El carisma de David Draiman y el sonido enérgico de la banda lograron una conexión intensa con el público chileno, que ya venía esperándolos con ansias tras varios años sin presentarse en el país. En esta ocasión, Disturbed formará parte de la nueva edición de KnotFest Chile.
Las entradas las puedes adquirir a través de PuntoTicket.
