A comienzos de mayo, Brian May, el legendario guitarrista de Queen, sufrió un accidente de jardinería, lesionándose uno de sus glúteos, motivo por el que debió ser sometido a una cirugía, manteniéndose en reposo y con mucho dolor en la zona afectada. Hoy el guitarrista reveló que días después comenzó a sentir fuertes dolores de espalda, por lo que debió realizarse una resonancia magnética con la cual descubrió que tenía un nervio ciático comprimido. May dedujo que era a causa de su caída anterior, pero no todo quedó solo ahí, el músico informa que sufrió un ataque al corazón.
Según explicó, debió soportar al menos 40 minutos de un fuerte dolor y opresión en el pecho, siendo asistido por su médico que lo trasladó de al hospital, lugar donde le realizaron un angiograma, encontrándole tres arterias obstruidas, siendo tratado con urgencia.
“Hemos descubierto que tengo tres arterias que estaban congestionadas y con riesgo de bloquear el riego sanguíneo al corazón” dijo el guitarrista.
Si bien los médicos recomendaron practicarle un triple bypass, May decidió colocarse tres stents (tubo pequeño de malla de metal que se expande en la arteria mantiéndola abierta). La recuperación ha sido satisfactoria y el músico pudo volver a su hogar sintiéndose mejor, comentando que “Era como si nada hubiera pasado, no sentía que hubieran estado en mi interior, no sentía nada”.
El afamado guitarrista de Queen, de 72 años, pudo resolver el problema satisfactoriamente, luego del susto ocasionado a sus seguidores, que se mantienen atentos a su evolución.