ARTÍCULOS | El último riff de JEFF HANNEMAN

LA ERA DEL ROCK

EL ÚLTIMO RIFF DE JEFF HANNEMAN

Por Freddy Veliz O.

El metal está de luto, uno de sus baluartes ha partido. Jeff Hanneman, guitarrista que con solo 17 años fundaba SLAYER junto a Kerry King, Tom Araya y Dave Lombardo en 1981, y que lo llevó a ser considerado dentro de los guitarristas más influyentes del lado más extremo del metal, no pudo ganar la batalla que comenzó por una mordida de araña, y que lo alejó de la banda para tratarse la necrosis que esta provocó en su brazo derecho, ese que nos dio los mas demoledores riff que hayamos conocido en los 80s, cuando forjaban una nueva forma de ver el heavy metal imperante en la época. Nunca se me borrará la imagen de Jeff rasgueando a toda velocidad las seis cuerdas en Hell Awaits en un viejo vhs con el mítico Combat Tour en que compartían cartel con Venom y Exodus, estos últimos liderados por Gary Holt, quien durante estos dos últimos años ha tenido la misión de ocupar el lugar del rubio guitarrista, a la espera de un posible regreso, espera que terminó hoy con esta abrupta partida.

Hanneman compuso Angel of Death, uno de los temas más extremos creados por una banda en la época, se ganó incluso acusaciones de difundir el nazismo, por inspirarse en Josef Mengele, médico que se ganó el apodo de Angel de la Muerte por sus experimentos con los detenidos en campos de concentración. El tema podría considerarse uno de los máximos himnos de la agrupación norteamericana. Esos veloces riffs que se van entremezclando con los característicos solos en conjunto con Kerry King, se convirtieron en una de las más reconocibles características de la banda. Ese es el gran legado de Jeff, y que cada vez que escuchemos un disco de Slayer la imagen de su melena rubia siendo sacudida al ritmo violento de ese muro sonoro, quedará plasmada en nuestra memoria. Aún tenía esperanzas de que estuviese de vuelta en la banda, y justamente eso pensaba (sin aún enterarnos de su muerte) durante la mañana de este 2 de mayo, debido a la próxima visita de Slayer compartiendo escenario con Iron Maiden, y en que con la salida de Lombardo la banda viene diseccionada. El destino, Dios o el Diablo, dijeron otra cosa, y terminamos el día con la lamentable noticia, Jeff con 49 años dejaba este mundo por una insuficiencia hepática en un hospital en Carolina del Sur, y a pesar que sabemos que el show debe continuar, Slayer nunca volverá a ser lo mismo.

No nos queda más que decir adiós Jeff,  en tu memoria, una lluvia de sangre caerá desde el sur del cielo.

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