Día a día conocemos más noticias sobre cómo nuestro medioambiente sufre maltratos, probablemente, irremediables por parte de la humanidad. Allí radica la inspiración de Ya No Da Más, el nuevo sencillo del trío chileno de power rock Aparecidos, quienes hacen un llamado al cuidado de la Ñuke Mapu (Madre Tierra en mapuzungun).
El sonido de Ya No Da Más, al igual que sus anteriores lanzamientos como Ríos de Sangre o Juntos Volemos, encaja dentro de un rock latino intenso y profundo, repleto de energía a través de su imponente base rítmica, guitarras estridentes y una aleación con un saxofón que, dentro de la canción, representa al Ñem (espíritu de la naturaleza, en la cosmovisión mapuche) que clama para que pare esta devastación.
“La canción nos habla desde la rabia, impotencia, ansiedad, desesperación, incertidumbre y sufrimiento por el maltrato a nuestra naturaleza, por parte de la conducta extractivista del capitalismo y su impacto dentro de la flora y fauna del Wallmapu” afirman los integrantes de Aparecidos: Diego Cayupán Salgado (voz y guitarra), César Gatica Palminio (batería y coros) y Óscar Jarpa Hidalgo (bajo y coros).
“Dentro de la canción se hace un llamado, incluso, al Wenu Mapu (la tierra o el mundo de arriba, el Cielo), pidiendo una explicación de lo que está pasándonos”, agregan.
Con Ya No Da Más, Aparecidos solidifica su carrera como una de las bandas más relevantes del nuevo sonido latinoamericano, recordando su participación en festivales masivos del sur de Chile como Rapamakewe, Festival De Raíz, Ruka and Roll, Kawin y Caminando por el Folk, además de su Gira a Buenos Aires y su presencia en el Festival Rockodromo. Junto con esto, también han estado nominados como Mejor Artista Rock a Premios Pulsar (2017).
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Chile
Aparecidos estrena videoclip con potente mensaje en “Ya No Da Más”
Con un mensaje que busca preservar la naturaleza y el medio ambiente, el trío chileno trae una canción que nace ante la conducta extractivista del capitalismo y su impacto en la flora y fauna en Wallmapu, al sur del país. La canción nos habla desde la impotencia, ansiedad y desesperación por el maltrato que sufre la Ñuke Mapu, siendo una temática constante en su discografía.