El histórico baterista del rock argentino Rodolfo García, murió hoy martes como consecuencia del ACV que desde el miércoles pasado lo había dejado con muerte cerebral. El músico integrante de bandas como Almendra, Aquelarre, Tantor, Jaguar y Los Amigo, entre otras formaciones, se desplomó en su casa y, pese a que fue intervenido quirúrgicamente, su vida se apagó.
Recién tenía veinte años cuando con Los Larkins, su banda del barrio, García dio el primer gran paso de su vida y alucinado con otras agrupaciones como Los Gatos y The Beatles, fundó uno de los grupos fundamentales rock argentino: Almendra.
Luego de Almendra, formó en la Nebbia´s Band, grupo en el que permaneció durante 1971, y grabó el disco epónimo. Tras tal paso, García fue parte intrínseca del origen de otra banda de gran peso: Aquelarre, la más importante que integró en la década del ’70, y en “casi” toda su historia. Junto a Héctor Starc en guitarra; su excompañero en Almendra Emilio del Guercio al bajo, y Hugo González Neira en teclados, surcó buena parte de la década, subido a una música tan bella como rebuscada.
Para 1977, el cuarteto no dio para más y García formó Tantor, banda imbuida en el jazz-rock de época, primero con Carlos “Machi” Rufino y luego con Marcelo Torres. Dos discos fueron el legado del trío. En medio de aquel proyecto pasó el retorno de Almendra con los inolvidables conciertos en Obras en plena dictadura cívico-militar, un disco y una gira que llevó canciones viejas y nuevas a rincones de Argentina donde jamás había llegado una banda de ese nivel.
La década del ’80 se la pasó entre amigos, bares, invitaciones y giras. Tocó un tiempo con Victor Heredia y también tuvo intensas incursiones en Santiagueños, la banda post MPA de Peteco Carabajal y Jacinto Piedra.
Sus amigos y colegas lo recordarán como el buen tipo que fue, además de su prolífico, diverso e incesante devenir musical y su intensa gestión colectiva en el imaginario cultural argentino.
