BEHEMOTH EN CHILE
16 DE NOVIEMBRE 2014 | CLUB BLONDIE
Luego de dos años, BEHEMOTH, los maestros polacos del metal extremo regresaron a Chile con nueva placa y con la promesa de llevarnos nuevamente a las profundidades del infierno.
Su última visita data de finales del 2012, cuando apabullaron el Club Kmasú de Blanco Encalada. Esta vez la cita fue la ya mítica discotheque Blondie, tres pisos bajo tierra, simbólicamente podríamos traducirlo como un lugar más cerca de don Sata. Ideal para sumergirse en la música de estos monstruos europeos.
Para la apertura, los nacionales de ANIMUS MORTIS tuvieron la responsabilidad de calentar motores. Un show compacto, que comenzó exactamente a las 20:00 horas y donde aprovecharon de mostrar parte de Testimonia, su más reciente trabajo. Con una formación remozada, la banda se presenta frente a un recinto con algo menos de la mitad de su capacidad, un público que escuchó con respeto la oscura propuesta de la agrupación santiaguina, que con una puesta en escena donde destaca la fuerza y desplante de su vocalista, se fue desarrollando con una calidad de sonido, que por momentos acusó algo de saturación, pero que en líneas generales fue bastante aceptable. Fueron 30 minutos de intenso black metal hecho en Chile.
Cuando estábamos un par de minutos por sobre las 21 horas, las llamas que aparece portando Nergal sobre el escenario, dan la bienvenida a BEHEMOTH y a las oscuras notas de “Blow Your Trumpets Gabriel”, extraído de The Satanist, última placa de los polacos, principal pretexto de esta nueva visita por tierras sudamericanas.
La atmósfera oscurantista comienza a apoderarse del recinto, las cabezas de los presentes se mueven al son de cortes como “Ora Pro Nobis Lucifer” también de la última placa, “Conquer All” y la poderosa “Decade of Therion” de Satanica (1999).
Con algunos acoples, los riffs de las guitarras se escuchan demoledores desde la mitad de la pista hacia el escenario, no así la parte más lejana a este, donde la intensidad y claridad se iban diluyendo.
Los coterráneos de Karol Wojtyla continúan guiándonos por terrenos infernales con “As Above So Bellow” y “Slaves Shall Serve” con el público coreando y levantando puños. Nergal saca aplausos cuando en un estudiado español nos asegura que “Dios está Muerto”, antes de enviar a los seguidores de Cristo a la arena con “Christians to the Lions”.
La bendición con incienso por parte del frontman nos sumerge en la oscura “Furor Divinus”. Y para rendir tributo a Siekiera, banda polaca post punk de la primera mitad de los ochenta, versionan el tema “Ludzie Wschodu”, original de sus compatriotas.
El calor reinante en el interior del Club Blondie, mas la aplanadora de metal que teníamos frente a nosotros nos hizo ser presas de una atmósfera claramente infernal, los sonidos del averno se hicieron patentes en esta nueva pasada de BEHEMOTH, quienes no se detienen ante nada y prosiguen el camino con “The Satanist” corte que da título a su obra 2014.
Con “Ov Fire and the Void”, “Alas, Lord is Upon Me”, “At the Left Hand ov God” y “Chant for Eschaton 2000” el cuarteto nos abdujo en un largo e hipnótico pasaje de guitarras donde las notas oscuras nos cubren de un maldito placer musical, extraído desde las profundas tierras de satanás. Este recorrido era el final del viaje, pero no podía faltar el encore, y a modo de despedida, los cuatro integrantes de la banda, enmascarados como negros demonios nos invocan a un satánico rito con “O Father O Satan O Sun”, para finalizar cual misa negra una noche de domingo, el día del señor, bajo el manto oscuro de una banda que se maneja a la perfección en una puesta en escena bien trabajada para crear la atmósfera precisa como complemento a la música y contenidos que proponen.
Un show breve, como acostumbran, pero de mucha intensidad, que más allá de dejar con gusto a poco, queda la sensación de que nada falta en un concierto de la banda. Repiten algunas fórmulas, pero el público los aplaude, celebra y se retira conforme ante la arremetida de los polacos, que cuentan con un grupo de feligreses que no falla ante cada visita de Nergal y compañía. Será hasta la próxima, las puertas del infierno estarán abiertas para un pronto regreso.
Review: Freddy Veliz
Fotos: Claudio Poblete
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